[Diario onírico] Sueños y pesadillas recurrentes - Caídas de dientes

 

Otra pesadilla que parece ser muy recurrente es que soñamos con que se nos caen o se nos rompen los dientes. Parece ser que esto, en psicología, significa falta de seguridad y confianza en nosotros mismos y también baja autoestima (tanto a nivel personal como laboral). Los dientes los mostramos a diario en infinidad de ocasiones, sobre todo cuando sonreímos, y nos avergüenza mostrarlos si por ejemplo los tenemos sucios (el típico trozo de comida de color oscuro atascado entre los dientes, o, en modo más coloquial, el buen "paluego") o si llevamos brackets (mi caso, pues lo odiaba).

En el caso de los animales el lenguaje corporal con los dientes es más complejo, pues suelen mostrarlos ante amenazas, como señal de desafío o también cuando tienen miedo.

Tuve una temporada muy mala en que soñaba muy de seguido que me miraba en el espejo en casa de mis padres y veía, con gran pesar y ansiedad, cómo se me iban cayendo los dientes o las muelas uno por uno. O que se me desintegraban en la boca, que se me soltaban mientras hablaba o que me bailaban a lo diente de leche para acabar cayéndose por su cuenta o quitármelo yo misma. Si nunca habéis soñado con esto os puedo asegurar que es una de las peores sensaciones que existen y, aunque en mi caso nunca hay sangre y que siempre me ha resultado indoloro a nivel físico, mentalmente sentía volverme loca. Por suerte actualmente he tenido algún sueño de este tipo pero mucho más aislado. 

Admito que la explicación psicológica encaja con mi personalidad pero creo que hay otros factores que determinan que sueñe con ello, al menos en mi caso. Desde siempre he tenido muchos problemas con los dientes; dejando de lado mi propensión a las caries y a la gingivitis he estado seis años con brackets (incluido el disyuntor, aparato para ensanchar el paladar) cuando el dentista me aseguraba que como máximo serían sólo dos; he llegado a tener un colmillo alojado en el paladar porque el puñetero homólogo de leche no quería caerse (me pasé un mes entero agónico con el disyuntor clavado en el bulto porque era tan tonta que no era capaz de decirlo y cuando me lo vio el dentista me dijo que cómo se me ocurría callarme) y también tengo cuatro premolares menos porque era necesario extraerlos para que mis dientes cupieran en mi boca porque sí, o tengo poco espacio o tengo las piezas muy grandes (en palabras de mi ex-dentista) y como soy afortunada y cuento con las cuatro muelas del juicio (bueno, ahora tres porque son torpes y están a medio salir, por lo que me tuvieron que sacar una al pasarme un mes con cara de luna llena) pues aquí dentro todos nos cogen, no. 

Los años con los brackets fueron particularmente horribles por los dolores en los dientes, las llagas en la boca, la comida atrapada en el acero y las continuas mordidas en las paredes de la boca; cuando me apretaban y/o me cambiaban el alambre me tiraba una semana sin poder comer casi nada sólido, lo único que no me dolía masticar era la clara de un huevo cocido, hasta la yema me costaba. Y, una vez pasado ese infierno de seis años, tuve que continuar con la ortodoncia nocturna de quita y pon (que actualmente no uso porque dejé de ponérmela y ya no me vale desde hace muchos años) y aún a día de hoy cuento con el retenedor fijo de ortodoncia (un alambre fijo detrás de los dientes inferiores). Sí, mi dentadura quedó muy bonita por este proceso... pero a qué precio (tanto psicológico, como físico como monetario para mis padres). Aún así y viéndolo como algo del pasado, sigo pensando que mereció la pena, aunque por culpa de mis malos hábitos he notado que los dientes y muelas se han movido un tanto y no están igual que al principio.

Con este historial a mis espaldas no es de extrañar que sueñe con el tema de caída de dientes, porque de hecho esa época coincidió conque tenía muchísima suciedad acumulada (sarro) y necesitaba limpieza, a la par que tapar varias caries pero no me decidía ir al dentista porque les tengo mucha tirria, la verdad, aunque no lo odio en absoluto.

¿Alguna vez habéis soñado con este suceso tan desagradable? ¿Lo hacéis y vuestro historial dental es impecable? Siento mucha curiosidad.